jueves, 31 de enero de 2019

Jan 30 at 11:48 AM
romulo lares 
To:javier.nart@ep.europa.eu
Cc:Alfredo Avella,Jose Manuel Zerpa Guerra,Genaro Mosquera C.,Ana Guia de Diaz,LUIS MANUEL AGUANA,Guillermo Salas,Alfredo Weil

Sr. Javier Nart
Diputado Parlamento Europeo

Atención: Srta. Adriana Florit

Distinguido Sr. Nart, lo saludo cordialmente.

Tomo unos minutos de su tiempo, que agradezco, para informarle y solicitar su consideración
as'i como del Congreso de los Diputados del Reino de España,
y adicionalmente para, por su intermedio, incorporar los documentos anexos
al expediente del "Caso Venezuela" en el Parlamento Europeo.

También fue enviado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas
en ocasión de su reunión extraordinaria sobre el caso la semana pasada.

Estaré en Paris hasta el próximo sàbado cuando regresaré a América.
Si hubiese interés de su parte o de alguna otra instancia para discutir sobre
el tema presentado y de nuestra competencia,
estaria dispuesto a reunirme personalmente. (+33 7 53 04 91 66)

Con la mayor estima y consideración, agradecido por su atención al caso
que considero con el rango de Holocausto en el siglo XXI, me suscribo,

Muy atentamente,


Por el CNE en exilio de Venezuela
Rómulo Lares Sànchez





romulo lares 
To:drun@un.int
Cc:Alfredo Avella,Jose Manuel Zerpa Guerra,GENARO MOSQUERA CASTELLANOS,LUIS MANUEL AGUANA,Ana Guia de Diaz,Guillermo Salas,Alfredo Weil


Consejo Nacional Electoral-CNE  
de la República Bolivariana de Venezuela
Decreto 4Junio2000 del Poder Legislativo Nacional
En exilio a partir del 23 agosto 2003
Señores Embajador Francisco A. Cortorreal presidente del Consejo de Seguridad y demás embajadores y representantes de los países miembros de la Organización de Naciones Unidas-ONU.
Referencia: Presentación y solicitud de Reconocimiento del órgano autónomo del Poder Público Nacional de Venezuela para la organización de elecciones y la proclamación de sus resultados. 
En concordancia con las declaraciones de los embajadores y representantes de los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas durante la sesión del Consejo de Seguridad Número 8452 del día de ayer 26 de enero, con el Orden del Dia: “LA SITUACION DE LA REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA”, con el objeto de procurar en el más corto plazo posible la convocatoria a elecciones que garanticen todas las condiciones indispensables para demostrar la legitimidad de cada una de sus etapas con la participación amplia y por consiguiente la clara e inobjetable proclamación de sus resultados.
Declaramos una vez más ante el pueblo de Venezuela y ante la Comunidad internacional de naciones representada por esa digna institución, de acuerdo con los artículos 333 y 350 de la Constitución Nacional de 1999, nuestra determinación y disposición para reasumir las responsabilidades y obligaciones relacionadas con la gestión y dirección del CNE, entre ellas garantizar la transparencia del Registro Civil y Electoral de los ciudadanos venezolanos así como la organización de elecciones y referendos interrumpidas ilegalmente en la fecha referida.
Solicitamos a las Naciones-Estados miembros de la ONU y sus gobiernos, el respaldo a nuestra organización mediante su reconocimiento así como el apoyo de los organismos nacionales y multinacionales especializados en las materias de Registro Civil y Elecciones, con el propósito de cooperar con un gobierno de transición y con el pueblo venezolano, para asegurar su compromiso que hacemos nuestro para convocar, organizar y proclamar autoridades elegidas de manera transparente e indeleble, mediante la participación activa y pasiva de todos los actores interesados.
Con tal propósito nos permitimos anexar documento del CNE-exilio preparado como respuesta a la promoción reciente, por parte de un grupo de compatriotas con amplia participación, para la organización de diversas instancias, entre ellas, de los miembros rectores del Consejo Nacional Electoral-CNE en acuerdo a la legislación y circunstancias vigentes.
Por otro lado, llamamos la atención de la ONU sobre el expediente acumulado que dispone tanto el despacho de la Secretaria General de la Organización de Estados Americanos-OEA como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a partir de 2003, cuando actuábamos en funciones de rutina antes de haber sido acorralados y obligados a pasar al exilio, así como también en documentos recientes determinados por nuestra participación en las sesiones de la OEA el pasado noviembre 2017, con el propósito de evaluar la existencia y comprobar las evidencias de suficientes argumentos y pruebas que determinasen la solicitud formal de admisión del Caso Venezuela por la Corte Penal Internacional, como así fuese solicitado.
Anexamos el documento referido y los invitamos a recurrir a los archivos de la OEA y de la CIDH para la referencia a los demás documentos relacionados.
Agradecemos los excepcionales esfuerzos tanto de las diversas representaciones nacionales de los estados miembros, así como de la Secretaria General, del Consejo de Seguridad y de la Comisión de Derechos Humanos para restablecer el Derecho y el Estado en el territorio venezolano.
Solicitamos su colaboración para la distribución de estos documentos a todas las representaciones acreditadas presentes en la sesión en cuestion como en la ONU.
Nos suscribimos, muy atentamente,
Por CNE exilio
Rómulo Lares Sánchez
Paris 27 enero 2019
Anexo. Documento 14 páginas. Noviembre 28, 2018: Asunto: Relacionado con la proposición pública de candidatos para conformar una Junta de Gobierno-JdG y la organización de la Dirección-Gestión del Sistema Electoral de Venezuela, mediante decisión-designación del Tribunal Supremo de Justicia Legítimo-contenida en “INFORME POLÍTICO ESTRATÉGICO”, noviembre 2018

Agradecemos al Asesor del Secretaio General Christopher Hernandez-Roy
y a la oficina del Embajador Gabriel Bidegain, Asesor Politico Principal
en la oficina del Secretario General, confirmar su recepcion y ordenar
el reenvio de esta correspondencia a las delegaciones de la OEA de:
Argentina, Brasil, Canada, Chile, Colombia y USA,
cuyos correos no aparecen publicados en la pagina de la OEA.
Gracias por su amable atencion.
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Consejo Nacional Electoral-CNE  
de la República Bolivariana de Venezuela
Decreto 4Junio2000 del Poder Legislativo Nacional
En exilio a partir del 23 agosto 2003

Señores presidente del Consejo Permanente y demás embajadores y representantes de los países miembros de la Organización de Estados Americanos-OEA
Referencia: Presentación y solicitud de Reconocimiento del órgano autónomo del Poder Público Nacional de Venezuela para la organización de elecciones y la proclamación de sus resultados. 
En concordancia con las declaraciones de los embajadores y representantes de los países miembros de la OEA en la sesión del día de ayer 24 de enero, en particular la conclusión dividida de respaldo al Presidente provisional de la República de Venezuela Ciudadano Juan Guaidó, Presidente de la Asamblea Nacional, con el objeto de procurar en el más corto plazo posible la convocatoria a elecciones que garanticen todas las condiciones indispensables para demostrar la legitimidad de cada una de sus etapas con la participación amplia y por consiguiente la clara e inobjetable proclamación de sus resultados.
Declaramos una vez más ante el pueblo de Venezuela y ante la Comunidad internacional y hemisférica de naciones representada por esa digna institución, de acuerdo con los artículos 333 y 350 de la Constitución Nacional de 1999, nuestra determinación y disposición para reasumir las responsabilidades y obligaciones relacionadas con la gestión y dirección del CNE, entre ellas garantizar la transparencia del Registro Civil y Electoral de los ciudadanos venezolanos así como la organización de elecciones y referendos, interrumpidas ilegalmente en la fecha referida.
Solicitamos a las naciones miembros de la OEA y por su intermedio al resto de la comunidad internacional, el respaldo a nuestra organización mediante su reconocimiento así como el apoyo de los organismos regionales especializados en las materias de Registro Civil y Elecciones, con el propósito de cooperar con un gobierno de transición y con el pueblo venezolano, para asegurar su compromiso que hacemos nuestro para convocar, organizar y proclamar autoridades elegidas de manera transparente e indeleble, mediante la participación activa y pasiva de todos los actores interesados.
Con tal propósito nos permitimos anexar documento del CNE-exilio preparado como respuesta a la promoción reciente, por parte de un grupo de compatriotas con amplia participación para la organización de diversas instancias, entre ellas, los miembros rectores del Consejo Nacional Electoral-CNE en acuerdo a la legislación y circunstancias vigentes.
Por otro lado, llamamos la atención de la OEA sobre el expediente acumulado que dispone tanto el despacho de la Secretaria General como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a partir de 2003, cuando actuábamos en funciones de rutina antes de haber sido acorralados y obligados a pasar al exilio, así como también en documentos recientes determinados por nuestra participación en las sesiones de la OEA el pasado noviembre 2017, con el propósito de evaluar la existencia y comprobar las evidencias de suficientes argumentos y pruebas que determinasen la solicitud formal de admisión del Caso Venezuela por la Corte Penal Internacional, como así fuese solicitado.
Anexamos el documento referido y los invitamos a recurrir a los archivos de la OEA y de la CIDH para la referencia a los demás documentos relacionados.
Agradecemos los excepcionales esfuerzos tanto de las diversas representaciones nacionales de los estados miembros, así como de la Secretaria General y de la Comisión de Derechos Humanos para restablecer el Derecho y el Estado en el territorio venezolano.
Nos suscribimos, atentamente,
Por CNE exilio

Rómulo Lares Sánchez
Paris 25 enero 2019

Anexo: Documento 14 páginas. Noviembre 28, 2018
Asunto: Relacionado con la proposición pública de candidatos para conformar una Junta de Gobierno-JdG y la organización de la Dirección-Gestión del Sistema Electoral de Venezuela, mediante decisión-designación del Tribunal Supremo de Justicia Legítimo-contenida en “INFORME POLÍTICO ESTRATÉGICO”, noviembre 2018.


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Rómulo Lares Sánchez
Miembro del CNE (Decreto ANC I. 4JUNIO2000) en exilio a partir del 22AGOSTO2003

Muy estimados conciudadanos venezolanos, Diego Arria, Asdrúbal Aguiar, Mario Iván Carratú M., Carlos Ortega, Carlos Fernández, Pedro Freites, Julio González García, Alberto Franceschi, Enrique Aristegueta Gramko, Alfredo Coronil Hartman, Jesús Petit Da Costa, Alfredo García Deffendini, Nedo Paniz, Rafael Huizi Clavier, Eduardo Páez Pumar, Genaro Mosquera C., Luis Manuel Aguana, Ana Mercedes Díaz, Guillermo Salas, Alfredo Weil, Alfredo Avella G., miembros del Tribunal Supremo de Justicia Legítimo y demás venezolanos en cualesquiera rincón del planeta donde se encontrasen.

Asunto: Relacionado
con la proposición pública de candidatos para conformar una Junta de Gobierno-JdG y la organización de la Dirección-Gestión del Sistema Electoral de Venezuela, mediante decisión-designación del Tribunal Supremo de Justicia Legítimo contenida en “INFORME POLÍTICO ESTRATÉGICO”, Noviembre 2018.

Estimados amiga, amigos y conciudadanos todos:

Agradezco la distinción al haber sido propuesto como miembro de un grupo con tan sobresalientes credenciales, “después de importantes reuniones con líderes venezolanos representantes de las fuerzas vivas, academias, empresarios, gremios, sindicatos y militares retirados… validados por especialistas”, para que conformasen el equipo del diseño y la dirección del Sistema Electoral de la nación.

Tengo el agrado de dirigirme a ustedes con el propósito de incorporar a esta iniciativa, elementos que habrían sido permanentemente desestimados a partir de 1999, que tendrían incidencia determinante en el fracaso del proceso de liberación de la nación del régimen instaurado de desprecio por el Derecho y la institucionalidad, que establecería como política de Estado la sistemática violación de los Derechos Humanos  tanto dentro de Venezuela como exportando el “terrorismo de Estado” a países de la región y del mundo.

Urgía abonar un suelo fértil que permitiese germinar una semilla capaz de conducir la Sociedad Civil de Venezuela, definitivamente, hacia el restablecimiento del Derecho e institucionalidad  al servicio de nuestros nacionales.  Hoy, después de 20 años de tragedias, es un imperativo disponer de “jardineros veteranos” para la poda y la descontaminación necesarias controlando los daños colaterales como consecuencia de encender un lanza llamas de la libertad para destruir el panal de avispas asesinas y las pestes, e imbuidos en la DIGNIDAD como valor fundamental para la existencia del Sapiens y de una Nación y una sociedad libres.

En criterio del Consejo Nacional Electoral-CNE en exilio silenciado por los “actores políticos” e instituciones públicas y privadas mediante su censura y autocensura permanente, también de medios de comunicación, que neutralizaría nuestro peregrinaje promoviendo la sindéresis y el llamado de atención para detener el desvarío general de la sociedad, que, a su vez impidiese el suicidio colectivo lanzándose al vacío cubierto mediante la farsa electoralista, cuando alertábamos positivamente que la selección inicial de la ruta por la que transitamos hoy hace 18 años, siempre nos conduciría hacia el abismo cada vez más profundo de la legitimación de un genocidio mediante un fraude institucional generalizado y el asalto y saqueo histérico del patrimonio público y privado, a su vez diseñados con el propósito de estimular la orgía que distrajese interna e internacionalmente los objetivos geopolíticos últimos, mientras se eliminaran progresivamente las libertades para establecer un Estado terrorista que nos condujese hacia la consolidación y longevidad de un régimen de ocupación del crimen organizado transnacional.  

Al éxito de las tácticas y de la estrategia para el invasor y sus cómplices internos y externos correspondería la tragedia de nuestro HOLOCAUSTO.

Las particulares condiciones de “estado de ocupación” que habrían sido establecidas progresivamente a partir de 1999 y con claridad a partir de 2003, son reconocidas de manera tácita hoy, después de 15 años, con esta proposición de quiebre definitivo mediante la conformación de una Junta de Gobierno y demás instituciones del Estado para que actúen coordinadamente, promoviendo su comprensión tanto por los nacionales así como por la comunidad internacional, con el objeto de mantener y ampliar el respaldo u obtener la neutralidad al programa y ejecución de las demás acciones institucionales necesarias para la recuperación de la nación.

Tal programa exigiría en el ámbito de la competencia especifica-institucional-electoral como condiciones sine quibus non, bajo el control del CNE-JdG y la participación directa del colectivo venezolano, las siguientes:

1) El punto final del estado general de terror, y la necesaria desocupación del territorio ejercida por Rusia, China, Irán, Siria y Cuba bajo la administración de esta última y sus diversos brazos armados sin sus banderas, mediante su cese de operaciones y retiro conjunto con sus diversos cómplices, grupos del terrorismo y del crimen organizado transnacional, entre ellos FARC, ELN, Hezbollah, así como de los operadores de la red de instituciones financieras públicas, privadas y clandestinas para la legitimación de capitales.

2) La suspensión de todo acto administrativo electoral organizado por los usurpadores de la actual autoridad electoral en el Consejo Nacional Electoral-CNE y en todos sus órganos subalternos y subordinados, incluyendo la suspensión electoral pasiva y activa respectivamente, de todas las organizaciones políticas y grupos de electores inscritos así como también de cualesquiera elecciones o referendos organizados por los demás usurpadores de los poderes públicos del Estado, de los estados, municipios y parroquias, o por ciudadanos, instituciones, grupos de opinión, aunque su ejecución técnica electoral se ajustase a las prácticas profesionales y al Derecho, porque definitivamente todos estarían comprometidos con su nulidad absoluta en razón de la circunstancia nacional descrita, teniendo presente que el objetivo fundamental para la ocupación sería, a partir de 2003, la propaganda falsa para promover la farsa: “sí tiene sentido realizar elecciones en (el territorio ocupado de) Venezuela como estrategia para restablecer el Estado, su soberanía y el Derecho”.

Ilustración de la necesidad de esta condición habría sido la iniciativa de un grupo de ciudadanos organizados en las denominadas “oposiciones” representadas por la “Mesa” de turno en el Referéndum Consultivo múltiple efectuado el 17JULIO2017, cuyo resultado fundamental, que por lo demás celebraría la ocupación, habría sido demostrar que sí sería posible mediante actividades electorales en apariencia profesionalmente organizadas y ejecutadas dirimir asuntos públicos-generales entre sólo una porción de la ciudadanía, la de las “oposiciones”, excluyendo la del “gobierno” pero sobre todo la Sociedad Civil que no estaría representada e inclusive desprecia las dos anteriores y de esta manera absurda pretendería contribuir a rescatar el Estado y el Derecho, ahorrando también los costos o la necesidad de expulsar la ocupación. Referimos algunas reflexiones específicas al final del documento. (Nota [i] - al final)

3) El inicio de la reconstrucción del Registro Civil de la ciudadanía de Venezuela para atender diversos propósitos prioritarios: restablecer de inmediato la atención de los nacionales por los servicios de identificación y de orden civil, su progresiva depuración mediante la participación abierta de todos los ciudadanos venezolanos y las autoridades de otras naciones, no sólo por el impacto de la inmigración y desplazamiento de nuestros nacionales sino también para colaborar con la erradicación de la siembra de terroristas, espías o la legitimación de la residencia de bandas de criminales en otros territorios, con el apoyo de las organizaciones multinacionales y otras competentes especializadas en la materia.

Con el propósito de aclarar nuestra argumentación, recapitularemos algunos actos-casos que introducirían nuestras reflexiones y contribuiría a explicarlas:

La génesis de la ilegitimación e ilegalización de todas las instituciones públicas se produciría el 3FEBRERO1999 durante la instalación del nuevo Congreso Nacional presidido por el Senador Coronel (EJ.-R) Luis Alfonso Dávila, Presidente de la Cámara del Senado y Henrique Capriles Radonski, Presidente de la Cámara de Diputados, cuya primera agenda contenía la cesión de la representación del Poder Ejecutivo de Rafael Caldera P. a Hugo Chávez F. como resultado de las elecciones del 6DICIEMBRE1998.

Habrían adoptado la condición de corresponsables de tal génesis las autoridades del Congreso Nacional, sus diputados y senadores, así como los demás representantes de los poderes públicos nacionales, de los estados y municipios, quienes habrían aceptado en silencio, tolerando-participando sin protesta ni salvedad alguna el bochornoso y escandaloso espectáculo de la transmisión de la representación del Poder Ejecutivo, con el ofensivo e inaceptable anuncio del nuevo Jefe de Estado de imponer como uno de sus primeros actos un Decreto-decisión ilegal tanto en el fondo como la forma, un insulto a la ciudadanía y a la institucionalidad, un claro “Golpe de Estado” que pretendería eliminar la Constitución, camuflándolo con una convocatoria a consulta popular para determinar el respaldo popular a una Asamblea Nacional Constituyente-ANC, haciendo cómplice al colectivo de la violación de la Constitución, que no preveía su reforma, modificación o eliminación mediante tal iniciativa.

El Decreto Presidencial No. 3 de esa misma fecha, convocando tal exabrupto sería convalidado por la Corte Suprema de Justicia-CSJ, como todas las demás violaciones del Estado y el Derecho, desde la eliminación del Congreso Nacional y la serie de estafas en referendos y elecciones del año 1999 organizadas por el Consejo Supremo Electoral-CSE, etapa inicial sellada con la farsa del 15 diciembre, en medio de una tragedia humana de origen natural, para desaparecer la República de Venezuela mediante la “Aprobación en Referéndum de la Constitución de una República Bolivariana de Venezuela”, farsa de la promesa fundamental contenida en su programa de gobierno. Se habría completado el Acto Primero.

Los actos referidos habrían anunciado con claridad el inicio de la desaparición del Estado y el Derecho en Venezuela, mientras la petrificación y falta cuasi absoluta de reacciones institucionales acelerarían la propagación de una epidemia irreversible de abandono e incumplimiento de las obligaciones de los poderes públicos, de sus hombres, olvidando la mayoría, insistimos, nuestra condición de Sapiens.

A partir de esa fecha las fuerzas políticas de la nación, todas representadas en cada acto, así como el resto de las instituciones y los Poderes Públicos perderían su autonomía para colocarse en posición subalterna y reactiva ante las progresivas arremetidas que simulaban su origen en el proyecto político del grupo de militares insurgentes en las intentonas criminales del 4FEBRERO y 27NOVIEMBRE1992, respaldados desde entonces por las denominadas izquierdas tradicionales venezolanas, “pacificadas” y tenedoras de gran prestigio nacional e internacional, así como por las élites políticas-económicas-empresariales y visibles guías como el grupo de los denominados “notables”, la Iglesia Católica-Estado Vaticano y la Compañía de Jesús a la vanguardia.

Pocos conocían que los líderes de los militares golpistas formaban parte de un grupo de jóvenes militares reclutados años antes para promover la subversión en Venezuela, también dentro de las escuelas militares, formados y entrenados en Cuba, Libia y otros destinos internacionales hacia dónde viajaban periódicamente. El silencio de los compañeros de armas y civiles comprometidos ha venido llevando los detalles a sus tumbas.

Pareciera imposible que la administración o los servicios de inteligencia de las Fuerzas Armadas y de otras naciones o las policías de Venezuela desconocieran el alcance y listas de los implicados, quienes debieron haber sido retirados del servicio activo, detenidos, enjuiciados y expulsados. Sin embargo, más bien habrían sido promovidos y asignados a unidades claves y de gran capacidad operativa que comandarían en las fechas de las intentonas referidas.

Progresivamente habría quedado al descubierto que todos actuaban siguiendo el plan estratégico de Cuba, como traidores de la patria en la conspiración que se habría iniciado desde los años 60 para completarse en los albores del siglo XXI, fortaleciéndose mediante la creación de exitosos instrumentos políticos o de propaganda como el “Foro de Sao Paulo” y el ALCA, proyectos regionales que promoverían y protegerían hasta hoy el Partido Demócrata de los EEUU, que habría impulsado determinantemente Barack Hussein Obama durante los 8 años de residencia en la Casa Blanca.

Se habría establecido el “campamento base” desde donde se iniciaría la ocupación de Venezuela, un proceso de destrucción sistemático progresivo de la institucionalidad, mediante el establecimiento de instituciones falsas proclamadas por el CSE y luego el CNE que, como sería público y notorio organizaría y ejecutaría las fundaciones para la entrega de la nación, su patrimonio público y su población a intereses de otras naciones, consolidándola mediante la ocupación armada silenciosa en razón de la cobarde traición a la patria de los responsables últimos para la protección de la institucionalidad, el bochorno del gentilicio y la pérdida de la dignidad de los hombres y mujeres de la Policía Constitucional o Fuerzas Armadas Nacionales-FFAANN.

La desaparición del ejercicio de la política ha sido consecuencia de la aplastante evidencia de la condición de nación ocupada por diversos ejércitos extranjeros, mercenarios y miembros del terrorismo transnacional bajo la administración de Cuba que han desarmado, desarticulado y anulado las fuerzas armadas, policiales y el resto de la institucionalidad venezolanas.

Quienes promueven o asumen la representación de las fachadas de las instituciones que mantiene la ocupación conforman la categoría de COLABORACIONISTAS, es decir, se definen como delincuentes, criminales por cómplices o más grave aún corresponsables de delitos como la traición a la patria, o de los crímenes y violaciones de todo orden que fuesen cometidos o inducidos por la ocupación.

En el “Caso Venezuela” los miembros de la categoría COLABORACIONISTA serán acusados, juzgados y sentenciados por el Sistema Jurisdiccional Penal Internacional en razón de que los crímenes por los que responderán poseen la categoría de Crímenes contra la Humanidad cuya jurisdicción es planetaria y sin prescripción.

La recuperación de la República incluiría el resarcimiento y la reparación hasta el límite de lo razonable y de la Ley, por las consecuencias humanas de orden directo y generacional por la violación sistemática como política de Estado de vidas, salud, patrimonios, persecuciones, secuestros, discriminaciones, torturas así como también el saqueo y la destrucción de los patrimonios públicos y privados. De todo lo anterior son responsables no sólo los invasores, los traidores y cómplices locales sino, más bien en primer término, los COLABORACIONISTAS por su condición de corresponsables.

Ante una realidad como la descrita es necesario construir alguna estructura alternativa para defender la nación y los nacionales en todos los ámbitos y luchar con todos los medios contra los invasores y sus cómplices descritos, con el objetivo de restablecer una nación libre expulsando la ocupación. Tal estructura la entendemos como la de la RESISTENCIA.

Los ámbitos de la RESISTENCIA podrían incluir:
1)      La participación dentro de los simulacros de instituciones ocupadas, mientras fuera tolerado o posible, para luchar de manera clara y abierta por el restablecimiento de la institucionalidad, el Estado y el Derecho y denunciar el estado de ocupación ante los escenarios que lo permitiesen dentro y fuera del territorio.
2)      La consideración de la necesidad de luchar contra los invasores y sus cómplices y colaboracionistas locales en la condición de clandestinidad, dentro o fuera de las instituciones mientras no fuesen establecidas las condiciones de control del territorio.
3)      La organización y/o participación formal y disciplinada de/en la lucha contra el invasor desde/en el extranjero.
4)      La constitución de una conducción superior o Junta de Gobierno para coordinar y dirigir la lucha tanto en el extranjero como dentro del territorio venezolano, que para ser legítima, es decir no simulada en razón de la presión de las condiciones de sabotaje y terror internas, tendría que despachar necesariamente desde una nación neutral fuera del alcance de la ocupación, a menos que el respaldo internacional asegure militarmente dentro de Venezuela la seguridad de la JdG así como de las demás instituciones relacionadas.
5)      La constitución de las demás instituciones en el ámbito “informal” en razón de su desconocimiento en el orden internacional y local, aunque real como quienes son marginados a la “economía informal” que cuenta hoy con revoluciones planetarias sin fronteras como las monedas virtuales y los “blokchains”, con el propósito de asumir la representación y gestión de la Nación “ocupada” en los campos diplomáticos, militares, policiales y de la administración de la cosa pública en general de acuerdo con las condiciones consideradas en R4.

A partir de los acontecimientos políticos durante 1999,  del inicio de la invasión y de la ocupación extranjera por el crimen organizado transnacional mediante el “Caballo de Troya” disfrazado de ideología, en medio del desconcierto general y la traición de la patria y de la propia condición de Sapiens de tantos, referidos brevemente en este documento, algunos ciudadanos concluiríamos que sería indispensable incorporarnos a la lucha contra los enemigos externos e internos actuando desde “adentro” de las entrañas de los monstruos, acción legitimada por las circunstancias descritas que podríamos referir como RESISITENCIA 1.

Otros cientos de miles de los millones que decidirían progresivamente emigrar o fueron forzados al exilio, participarían u organizarían la RESISTENCIA 3, como decenas de miles que permanecen en el territorio para adoptar la R2 sin coordinación efectiva territorial, ni entre ambas.

Este documento responde a una necesidad demorada por el enorme poder de los enemigos de Venezuela y sus cómplices para impedir la organización de la RESISTENCIA 4, razón por la que sin lugar a dudas decenas de miles de venezolanos habrían optado, han operado y operan dentro de la opción 5.

Es necesario que sea comprendido y aceptado definitivamente, porque está demostrado sin lugar a duda posible que la política de exterminio diseñada y ejecutada por el Estado de ocupación forajido, que asesina directa o indirectamente para imponer el terror general, disfrazando los miles de víctimas de la resistencia e imponiendo un genocidio que condujo al HOLOCAUSTO, como si fuesen producto de su propia incompetencia y de la conflictividad social que él mismo administra y regula, definiría quienes poseen las condiciones de miembros de la RESISTENCIA.

En la vanguardia de la “resistencia” venezolana estarían quienes participaron electoralmente de forma activa y pasiva en el proceso de fraude del año 1999, de la primera ANC, representada por un lado por quienes participaron, anulando su voto, se abstuvieron o votaron rechazándolo, en razón de la combinación de referendos y votaciones,  así como por el otro, quienes fueron postulados o pretendieron postularse, grupo de candidatos que sólo aportó marginalmente siete (7) de los ciento veinte y cuatro (124) miembros que la conformarían, en razón de la manipulación de una primera talanquera que permitiría que sólo unos  pocos recibieran la “luz verde” del CSE para inscribirse y participar como candidatos o como representantes de organizaciones políticas o grupos de electores, en la farsa electoral para la designación de los miembros y luego, por la escandalosa manipulación para condicionar los circuitos, demás etapas y tal resultado de 124-7 con el respaldo de alrededor del 60-40% de los votos respectivamente y un 62,35% de abstención. Se completaría el Acto Segundo.

Otro muy pequeño grupo de la “resistencia” surgiría como resultado de los escándalos del fraude nacional ejecutado por el CNE I durante la organización y la suspensión de la macro elección récord por el número de candidatos participantes, cargos a elegir y complejidad en la historia electoral del planeta, programada  para “el 28, el 28, el 28…….de mayo 2000”, cuyo colapso daría origen a aún más desprestigio para la “clase política” y a la conformación de un segundo CNE, CNE II de consenso nacional mediante una “Mesa de Diálogo” convocada por la AN de transición-Congresillo y administrada en su seno, en la que habría participado con la mayor amplitud y transparencia la diversidad de los sectores sociales e institucionales y cuya propuesta para el CNE II habría quedado abiertamente legitimada y sería decretada por el Congresillo con la cuasi unanimidad, con un voto salvado, el 4JUNIO2000.

Aunque la mayoría de los 10 miembros de aquel CNE II responderían primero a los intereses de los bandos del régimen-“gobierno” o de los del régimen-“oposiciones”, es decir del régimen de ocupación y luego a los de la Sociedad Civil en general, la institución sería empujada desde su interior hacia el rumbo de la institucionalidad del Poder Público Nacional para proteger los intereses generales de los ciudadanos.

El CNE II condujo admirablemente la reparación del bochornoso escándalo referido y la recuperación de la confianza del colectivo para participar en la convocatoria progresiva de las elecciones de todos los cargos de representación popular, así como la renovación de autoridades en los sindicatos, algunos gremios y de los partidos políticos, sin embargo, progresivamente sucumbiría a las agresiones sistemáticas de los demás poderes públicos y al sabotaje interno con consecuencias que comprometerían los resultados de algunas consultas y finalmente la pérdida absoluta de la autonomía y su sometimiento forzoso al régimen de ocupación militar y político, que obligaría durante el final del año 2002 y el principio de 2003 a paralizar cualesquiera consulta electoral para impedir que fuese atropellada flagrantemente la voluntad del colectivo y desconocida la Sociedad Civil, hasta el 23AGOSTO2003, cuando se produciría un Golpe de Estado más del TSJ para conformar otro CNE, CNE III falso, que actuase conjuntamente con el crimen organizado transnacional administrado por Cuba, como instrumento y fundamento para “legitimar” el régimen ante locales y el mundo mediante fraudes electoralistas.

Progresivamente el CNE II habría contribuido con la confusión general, olvidando su institucionalidad y responsabilidad de Estado obligado a proteger los indivisibles derechos políticos del colectivo, de la Sociedad Civil, caería en la celada de dividirlos entre la politiquería de los del “gobierno” y los de las “oposiciones” desconociendo el Derecho, tomando decisiones parcializadas.

El caso más escandaloso habría sido cuando pretendiendo favorecer las “oposiciones” en un primer intento fallido de convocatoria ilegal del Referéndum Consultivo referido sobre la gestión de Hugo Chávez del 2FEBRERO2003, que habría contribuido a incrementar también las tensiones con quienes se sentían identificados con el “gobierno”.

Aunque los vicios en su forma habrían sido subsanados al completarse los requisitos legales, su parcialidad estaría en el centro de la argumentación que alimentaria y precipitaría diversos acontecimientos nacionales empujando el incremento exponencial de la conflictividad política y social. La ocupación habría logrado el objetivo de avanzar al dividir aún más la Nación.

Otras vanguardias de la resistencia, de PDVSA, de la CTV, de la FEDECÁMARAS, de las FFAANN, de militares uniformados en la Plaza de Francia-Altamira, de múltiples instituciones y asociaciones como las de padres-“con mis hijos no te metas” y demás manifestaciones públicas gigantescas de millones de participantes en sólo una jornada, jamás vistas en Venezuela que impresionaron al mundo hasta el “Paro Cívico Nacional” de varias semanas y el pronunciamiento en escalada de grupos de oficiales de los diversos componentes de las Fuerzas Armadas y de las policías que conducirían al breve interludio presidencial de Pedro Carmona E. y sus cómplices, absolutamente improvisado y ejecutado con torpeza, demostrando la total incompetencia de quienes habrían despreciado y destruirían compromisos de la precaria institucionalidad entre los grupos del “gobierno”, de las “oposiciones” y las organizaciones de la Sociedad Civil en las impresionantes y contundentes expresiones públicas de la RESISTENCIA, que de una u otra forma actuarían en defensa de la dignidad del gentilicio y de la nación, como también en la legítima defensa de sus familias y propia.

A partir de estas fechas podríamos establecer la muy larga lista de honor de los patriotas mártires de la resistencia, tanto reportados por los medios y las redes sociales como anónimos, enterrados también en el olvido por medios e instituciones para contribuir con el apaciguamiento, la complicidad y la corresponsabilidad con la ocupación y sus consecuencias.  

Sería ya posible comprender en aquellos tiempos de violencia y muerte visibles cotidianamente, que los primeros mártires habrían sido quienes fueron asesinados por defender con firmeza la institucionalidad de la República durante las intentonas golpistas de 1992. El movimiento de la resistencia tendría entonces allí sus primeros mártires y su origen, conformando progresivamente la mayoría aunque desconocidos y olvidados, quienes han participado en la clandestinidad, disimulados entre las demás víctimas del genocidio de centenares de miles de inocentes establecido como política de Estado para encubrir la ocupación y sembrar el terror, disfrazándolo a su vez de incompetencia del Estado de ocupación y por el fracaso en la aplicación de una ideología, argumentos demostradamente falsos, producto de una matriz de opinión fabricada que hasta hoy aceptan cándidamente las instituciones nacionales e internacionales y como consecuencia, también los actores  del “régimen-gobierno-oposiciones” y la Sociedad Civil. 

La creación del CNE en exilio se produciría en este “ambiente” y como consecuencia de dos decisiones escandalosas del TSJ, el 30NOVIEMBRE 2002 en una Sala Electoral Accidental y el 22AGOSTO2003 en su Sala Constitucional:

PRIMERA: la suspensión el 30NOVIEMBRE2002 del Referéndum Consultivo sobre la gestión de Hugo Chávez decidida como “último recurso” del régimen, inventando una “decisión” bochornosa e insólita de una Sala Electoral-Accidental conformada por transeúntes de los alrededores del Palacio de Justicia, para impedir tal consulta electoral que había sido convocada por el CNE II para el 2FEBRERO2003, como consecuencia de la movilización nacional de la Sociedad Civil y las “oposiciones” para presentar millones de solicitudes-firmas, en cantidad excedentaria a la exigida. Su cronograma avanzaba mediante la iniciativa del CNE II para organizar exitosamente una “colecta pública” con el apoyo de diversas instituciones privadas, promoviendo un programa de contribuciones particulares en razón del secuestro en la Tesorería Nacional de los fondos presupuestados propios con el propósito de impedirlo.

La decisión de la Sala Electoral-A fue denunciada por el CNE II ante medios de comunicación e instituciones nacionales e internacionales y posteriormente, una vez considerada agotada la instancia nacional, recurrida oportunamente por ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la Organización de Estados Americanos-OEA.

SEGUNDA: el nombramiento de otra directiva así como algunos funcionarios subalternos del Poder Electoral-CNE decidido por la Sala Constitucional el 22AGOSTO2003.

Esta decisión invadió las competencias de los Poderes Públicos Nacionales Legislativo y Electoral, doble fraude constitucional del TSJ que habría consolidado el Golpe de Estado con el propósito   de eliminar definitivamente  la posibilidad real de la Sociedad Civil para designar autoridades o dirimir diferencias políticas mediante consultas-referendos profesionales e imparciales, cuando designó otros rectores y personal subalterno quienes demostrarían su condición de criminales desde las primeras horas como usurpadores de la representación, dirección y gestión del CNE III.

En cuanto a la forma, el TSJ promovería decisión previa relacionada con el mecanismo para el nombramiento de la vacante del Vice Fiscal General de la República, del “vacío constitucional-institucional”.

La primera semana de despacho de los usurpadores del CNE, CNE III, quedaría al descubierto la razón primera para la decisión urgente del TSJ-SC cuando desconocerían anulando los millones de firmas que serían recibidas y procesadas para convocar el Referéndum Revocatorio de Hugo Chávez, que venía siendo preparado y estaba programado para ser convocado en SEPTIEMBRE2003.

Eliminado el proceso del Referéndum Revocatorio se entraría en el bochorno colectivo y la desaparición de la dignidad, una etapa de meses de escándalos, burlas, violaciones al Derecho, terror y crímenes diversos, se iniciarían varias recolecciones sucesivas de firmas que serían anuladas parcialmente, también decisiones contradictorias del TSJ entre las Salas Electoral, Constitucional y Plena que como resultado retrasarían más de un año la convocatoria y ejecución del Referéndum Revocatorio, redactando la pregunta que debería ser respondida con un “NO” o un “SÍ” con un sentido de consulta “ratificatoria” inexistente e inventado para complacer los caprichos de quien para ese momento usurpaba la Presidencia.  

El proceso “ratificatorio” de Hugo Chávez habría conformado un fraude demostrado sin lugar a duda posible desde diversos ángulos técnicos, prácticos, jurídicos y comunicacionales. El objeto de la proliferación de todo tipo de vicios institucionales, jurisdiccionales y constitucionales relacionados con el Referéndum Revocatorio-“ratificatorio” en el CNE y el TSJ, tenía como propósito ganar tiempo para mejorar la capacidad de fraude interno y en general para revertir los resultados de las claras encuestas que demostraban que una abrumadora mayoría de venezolanos, identificados con las “oposiciones” pero también con el “gobierno” deseaban desesperadamente revocar su mandato, plan adicionalmente confesado públicamente por la parte-el “ratificable” relevando de la prueba. Los “verdaderos” resultados lo habrían revocado.

Dicho esto, también habría que agregar que para colmo del desvarío, tanto el ex presidente César Gaviria quien se había prácticamente mudado a Caracas durante ocho (8) meses, como el ex presidente James Cárter personalmente, así como el Centro Cárter y los representantes de las misiones de la Comunidad Europea, todos habrían concluido que el proceso se había realizado sin dejar evidencia contraria de un proceso que ¡reflejaría fielmente  la voluntad de los electores!

Todos habrían sido cómplices capturados in fraganti con las manos en la masa de la destrucción de la democracia en Venezuela.  Fin de Acto III.

El CNE II había reaccionado de manera institucional en defensa de la legalidad ante la flagrante extinción de la democracia desapareciendo el sufragio, mediante decisiones y acciones administrativas y jurisdiccionales que se acumulaban a las anteriores denuncias y recursos por la anulación del Estado de Derecho y la violación de diversos Derechos Humanos de los ciudadanos, tanto mediante acciones individuales como institucionales conjuntas del Presidente, Vicepresidente y un miembro principal, es decir en mayoría calificada de tres (3) de los cuatro (4) rectores, denunciando tanto en medios de comunicación como instituciones relacionadas nacionales e internacionales, así como explicando directamente en audiencias individuales ante un numeroso grupo de embajadores de naciones de América y Europa con intereses mayores en Venezuela.

En el ámbito internacional denunciamos el secuestro de la institucionalidad electoral por el crimen organizado en el seno de dos reuniones hemisféricas, tanto en Panamá como en el Perú. La primera, ante la “REUNIÓN INTERAMERICANA DE AUTORIDADES ELECTORALES”, Panamá 12-14MARZO2003,  y posteriormente ante la “REUNIÓN DE PRESIDENTES DE ORGANISMOS ELECTORALES ANDINOS”, Lima 5-8JUNIO2002, ambas bajo el co-patrocinio de la Organización de Estado Americanos-OEA.

Entre las diversas acciones jurisdiccionales recordemos: 1) el recurso-denuncia de la decisión de la Sala Electoral-Accidental del TSJ ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA (CNE II, 2003) solicitando la investigación y decisión oportuna en razón de su impacto directo y evidente sobre prácticamente todos los DDHH de los ciudadanos y, 2) la denuncia criminal de los usurpadores de los poderes públicos ante la Audiencia Nacional del Reino de España en el Juzgado 5to. de Instrucción a cargo del Juez Baltasar Garzón (CNE exilio, 2005) acción que solicitaba entre otras peticiones, la emisión de la orden de captura de Hugo Chávez y demás funcionarios que resultasen corresponsables de las violaciones sistemáticas, permanentes y continuadas de los Derechos Humanos de los venezolanos y su consecuencia: otro HOLOCAUSTO en el siglo XXI.

Considerando suficientes las referencias para el propósito de este documento, gestiones que habrían permitido demostrar en su contenido y en los documentos allí referidos, la inexistencia de Estado ni Derecho en el territorio y sobre las que se habría sustentado la demostración de la desaparición de la institucionalidad así como la ocupación de Venezuela por el crimen organizado transnacional, que sin lugar a dudas se habría concretado para vergüenza de nuestro gentilicio. Menos habría hoy tampoco razón alguna que justificase que se siguieran cometiendo los mismos “errores” ni las mismas “traiciones” repetidos sistemáticamente a partir de 1999.

Desde 1999 sería razonable aceptar que el régimen conformado por “gobierno-oposiciones” en todas las autoridades nacionales, regionales, municipales y representaciones ante los Parlamentos Andino y Latinoamericano serían usurpadores de sus cargos y a partir de 2004 doblemente ilegales, tanto en la forma en razón de las circunstancias-origen como cuando habría desaparecido todo vestigio de legalidad también de los demás instrumentos para el ejercicio activo y pasivo del sufragio, registro civil, electoral y de los grupos, organizaciones y partidos políticos así como por su desempeño en concordancia con los intereses de la ocupación, mucho más grave aún las consecuencias, que han sido definidas y documentadas como apartheid, genocidio y HOLOCAUSTO.

Si bien la constatación de tales condiciones nos habrían colocado desde entonces en el ámbito de reaccionar en “legítima defensa”, en razón del ambiente de “institucionalidad simulada” y de “genocidio”, que nos autorizaría y obligaría a actuar con un margen de acción que desbordase necesariamente las talanqueras imaginarias impuestas por los usurpadores de los poderes públicos, sin embargo, no ha sido comprendida ni convalidada por la opinión pública en general controlada por la ocupación mediante el terror y por sus diversos intermediarios, tanto por los del “gobierno” como por los de las “oposiciones” ambos al servicio de la ocupación, por lo que sería indispensable la claridad sobre el tema para comprender el curso general de acciones verdaderamente orientadas hacia la liberación del territorio venezolano.

Como consecuencia de lo expresado nos encontramos en una condición excepcional, trágica e incapaces para liberarnos sin la cooperación política, diplomática, policial y militar proveniente de otras naciones amigas y fundamentalmente de las vecinas, por lo que las soluciones que se diseñen, aunque pudiesen desarrollarse milagrosamente sin adicionar aún más violencia, no podrían ser promovidas ni consideradas como de “transición”, porque  de lo que se trataría sería del establecimiento de un Estado en Derecho, de la desocupación de los criminales invasores de nuestro territorio, lo que representaría un quiebre definitivo del rumbo mantenido a partir de 1999 por todos los corresponsables de la sistematización de la violación de los DDHH como política de Estado forajido, por quienes habrían asumido los disfraces de una institucionalidad inexistente o por cualquier otro  medio pretenden seguir sosteniendo la ocupación o representasen tales intereses.

Este grupo lo conforman prófugos peligrosos, miembros prominentes del crimen organizado transnacional, delincuentes confesos por la comisión in fraganti de sus crímenes, es decir quienes de manera pública, notoria y comunicacional han sido o siguen siendo cómplices y corresponsables de la ocupación y de sus consecuencias: crímenes contra la Humanidad, de HOLOCAUSTO en Venezuela, sin prescripción para ser juzgados y de la competencia de cualquier tribunal en el planeta.

Todos estos criminales han sido y serán útiles  para la liberación de Venezuela. Los mecanismos para su participación serían definidos en cada caso, quizá en la forma de una colaboración subordinada y administrada por el juez penal correspondiente.

Para el colectivo nacional, la Sociedad Civil, lo que interesa sería la obtención de resultados que nos devuelvan la vida y la libertad en nuestra nación. No parece importante cómo se logra tal objetivo, ni menos quienes dirigen sino la competencia y el compromiso de los involucrados. En consecuencia, la ilegitimidad e ilegalidad del origen institucional como las del grupo de venezolanos organizados en el TSJ-L pareciera no tener trascendencia o ser determinante en nuestro caso porque se trataría de un grupo que contribuiría con la organización de la legítima defensa de las vidas de todos nuestros conciudadanos y por supuesto de las propias.

Mientras que los 7 miembros de la “resistencia” diputados en la ANC I y algunos de los miembros del Directorio-rectores del CNE II estarían sometidos a las restricciones por la condición de miembros de cuerpos colegiados que representarían una farsa en el primero e intereses contradictorios y asfixiados por el avance de la ocupación en el segundo, la condición del TSJ-L es distinta: tienen sus miembros Magistrados la visión clara de las estrategias de la ocupación, libertad de acción y movimiento por residir en el extranjero, gozan de la protección de varios gobiernos: USA, Colombia, Chile, Perú además de la Organización de Estados Americanos-OEA, de la Corte Penal Internacional y de la Comunidad Europea, condición que les ha conferido su verdadera legitimidad y el reconocimiento internacional, ante y a pesar de un origen dudoso en y de una AN completamente viciada y desprestigiada que como primer paso deberían denunciar y desconocer, que habría generado dudas sobre los verdaderos motivos de sus designaciones y de la persecución y huida de Venezuela, que adicionalmente luce paralizado, a pesar de que tendría también la capacidad para “auto depurarse” retirando de su seno a quienes representen el “régimen de ocupación-gobierno-oposiciones” e incorporando de manera autónoma las vacantes con otros magistrados que representen la institucionalidad y el Derecho, proclamando desde su tribuna su reconocimiento a la JdG, contribuyendo a legitimarla, en vez de asumir la génesis de su creación y su conformación, así como el CNE-en exilio y las demás instituciones, y sobre todo atendiendo oportunamente su función jurisdiccional específica en los recursos y consultas específicos que les fuesen presentados ante cada Sala para el avance del proyecto que nos convoca.

En todo caso nos correspondería a todos respaldar más bien la conveniencia de que el TSJ-L deslastrado del origen de su designación en la Asamblea Nacional, demuestre su compromiso con la recuperación de la “institucionalidad” de Venezuela y corte su cordón umbilical para conectarlo más bien con la protección del Derecho actuando de manera autónoma.

La carga de ilegitimidad e ilegalidad es abrumadora en razón de sus vínculos continuados con la ocupación a partir de 1999 y con otras instituciones y personas responsables directas de la ejecución sistemática, permanente y continuada como “política de Estado” de crímenes contra la Humanidad, como lo hemos manifestado acá y en documentos dirigidos tanto a la OEA como a la Corte Penal Internacional y remitidos al TSJ-L.

Podría argumentarse, dadas las particulares condiciones de Venezuela y de los venezolanos, que la legitimidad del TSJ-L sería inobjetable cuando fundamentase su “renacimiento” en una decisión autónoma de un grupo de compatriotas, ciudadanos, profesionales reconocidos del Derecho con experiencia académica y jurisdiccional que actuasen como y declarando su institucionalidad legítima al respaldar la RESISTENCIA y conformándola.

Igual razonamiento habría  sido válido para el grupo de conciudadanos que conformasen la Junta de Gobierno-JdG y el Sistema Electoral, o cualesquiera instituciones que cree la JdG o por iniciativas idóneas que luego fuesen reconocidas y respaldadas por la JdG en nombre y representación del colectivo secuestrado de Venezuela.

Pero la necesaria definición de la ruptura con la forma equivocada, fundamentalmente criminal serial industrializada de la actuación de las autoridades públicas y de activistas diversos, cuyo propósito sería incorporar a la JdG y a los organismos relacionados a personas comprometidas con el HOLOCAUSTO, no puede ni debe ser tolerado bajo ninguna circunstancia.

Serían entonces aclaradas las contradicciones derivadas del proyecto según el cual sería necesario que una institución o un individuo absolutamente comprometidos con la bochornosa historia a partir de 1999, fuesen necesarios para colaborar con la causa de la liberación, aunque jamás para decidir absolutamente nada relacionado con la JdG ni para sugerir quiénes podrían conformar los cuadros de la DIGNIDAD para liberar Venezuela.

Como corolario de nuestra reflexión y dadas las condiciones internacionales y la dependencia absoluta de nuestro futuro como sociedad a ella y sus acciones, así como la continuidad del genocidio y el HOLOCAUSTO en Venezuela, convocaríamos y exhortaríamos un llamado conjunto a la cooperación de todos los ciudadanos para que actuásemos aportando cualesquiera que fuesen nuestras condiciones y capacidades, para asumir las tantas tareas que sería indispensable asegurar en cada rincón del territorio y del planeta para lograr el objetivo común: ¡nuestra LIBERTAD!

LO ANTERIOR, AUNQUE INCOMPLETO, ES SUFICIENTE PARA JUSTIFICAR CUALQUIER ACCIÓN QUE SE INTENTE PARA RESTABLECER LA REPÚBLICA, LA NACIÓN.

BASTA OBSERVAR EN NUESTRO ENTORNO LA EXTREMA GRAVEDAD DE LO VISIBLE, LA DESTRUCCIÓN FISICA Y ESPIRITUAL DE VARIAS GENERACIONES DE CIUDADANOS INOCENTES, NO TENIENDO PRESENTE LA AÚN MÁS OPROBIOSA REALIDAD NO VISIBLE PARA EL CIUDADANO COMÚN O NEGADA POR ALGUNOS Y POR QUIENES CONFORMAN EL RÉGIMEN-GOBIERNO-OPOSICIONES, QUE CARCOME LAS ENTRAÑAS Y EL ALMA DE QUIENES TENEMOS CONSCIENCIA.

LA CONDICIÓN DEL SER DEL HUMANO DETERMINA LA FIRMEZA FRENTE A QUIENES OLVIDARON SU CONDICIÓN DE SAPIENS PARA COLABORAR EN EL SIGLO XXI CON OTRO HOLOCAUSTO, PRESENTÁNDOLOS OPORTUNAMENTE ANTE LA JUSTICIA COMO CONDICIÓN INDISPENSABLE PARA QUE LOS CONCIUDADANOS DE VENEZUELA COLECTIVAMENTE RECUPEREMOS NUESTRO GENTILICIO Y NUESTRA DIGNIDAD. 

Todos, como ciudadanos libres, activados y empujando hacia el objetivo declarado.

Cuando Venezuela sea libre y aseguremos tal condición de forma permanente entre todos nuestros compatriotas, tendremos la ocasión y la obligación entonces de enfrentar el juicio por el cumplimiento de nuestros deberes.

Muy atentamente,



Referencias documentadas en:




Nota [i]: “Referéndum” consultivo que habría sido convocado sin la participación del CNE, con la pretensión del objetivo declarado de demostrar el desprecio y el desconocimiento colectivo de la institución, por lo que los organizadores conformarían parte de una porción mayoritaria de los ciudadanos que participasen y manifestasen a favor de los temas consultados, mientras una minoría lo haría en oposición a ellos:
1. Negar la iniciativa del régimen-“gobierno” para convocar otra Asamblea Nacional Constituyente.
2.  Ordenar a las Fuerzas Armadas Bolivarianas-FAB su obediencia a la decisión de la Asamblea    Nacional-AN, a su vez en desacato de decisión del Tribunal Supremo de Justicia-TSJ.
3. a) Demandar la renovación de los poderes públicos.
     b) Solicitar la convocatoria a elecciones generales libres y transparentes.
                     c) Abogar por el nombramiento de un Gobierno de Transición de Unidad Nacional.

Esta convocatoria a “Referéndum” múltiple, desde el carácter público de su convocatoria, organización, administración, totalización, escrutinio y proclamación de resultados, habría carecido de legitimidad por la falta de garantías y por someter a consulta ciudadana cuestiones absurdas o ilegales, no teniendo sus resultados valor técnico, electoral o político y contradictorios para la opinión pública cuando su diseño insistiría en la promoción de la división de la sociedad mediante participaciones parciales de la misma.
La bondad de esta iniciativa habría sido su pretensión de demostrar a una parcialidad-grupo de ciudadanos del régimen-“oposiciones” y al mundo que el CNE no sería confiable, de la misma manera como el CNE promovería su confiabilidad a otro grupo del régimen-“gobierno”,  pero no se llenaría la condición fundamental de un Sistema Electoral, su autonomía, el carácter general de sus consultas, teniendo algunos vicios fundamentales adicionales que podríamos referir:

1)       la ilegalidad e ilegitimidad de someter a consulta pública tanto principios del Derecho como opciones ilegales.
2)       el anonimato de sus organizadores,  comprensible en razón del estado de terror, de la inexistencia de Derecho y la necesidad debida de proteger a sus responsables.
3)   Habría sido organizado por uno de los dos grupos del “régimen” que usurpan los poderes públicos, las denominadas “oposiciones”,  sin representación alguna del otro grupo denominado “gobierno”, ambos al margen y de espaldas de la desesperada Sociedad Civil que conformaría las grandes mayorías.

Habría sido mostrado estadísticamente que la abrumadora mayoría de ciudadanos no se sienten representados por alguno de ellos, adicionalmente que los volúmenes históricos de votantes por uno u otro grupo serían consecuencia de la manipulación y de la promoción de la polarización deliberada, diseñada por ambos y administrada por el CNE para el beneficio de ambos, en detrimento de los intereses de las mayorías y para consolidar su esclavitud.

Esta actividad electoral que referimos tendría importancia para ilustrar el nivel de manipulación. Por un lado el régimen de ocupación tolera que se realice un acto ilegal-subversivo que promovería exclusivamente su componente “oposiciones”, simulando la tercera fractura electoralista entre los cómplices del régimen de ocupación desde 1999 entre “gobierno” y “oposiciones”, condición que pretendería exonerarlos a ambos, al régimen, por las responsabilidades en el fraude electoral que sostienen.

La dos anteriores fracturas del régimen entre “gobierno” y “oposiciones” habrían sido durante los fraudes electoralistas organizados por el CNE, conocidos como “Referéndum Revocatorio”-“ratificatorio” de Hugo Chávez el 15AGOSTO2004 y la “Elección de los diputados a la Asamblea Nacional” del 4DICIEMBRE2005. 

En el primer evento habría participado más del 94% de los inscritos en el Registro de Electores, votantes pro “gobierno” y pro “oposiciones”, quienes de acuerdo con las pocas encuestas independientes y la interpretación de las contradicciones de las demás publicadas o no, habría sido posible concluir que la mayoría habría manifestado su SÍ para revocar el Presidente, mientras que el CNE habría dado resultados de una votación importante para ambas opciones y había invertido los resultados declarado el triunfo del SÍ ratificatorio. Este mega fraude habría dejado el récord de la mayor participación en eventos electorales en Venezuela y probablemente superado en el mundo por los 99,+% del electorado cubano en favor de las proposiciones o candidatos recomendados por Fidel Castro.

El segundo evento-fractura habría sido realizado más de un año después, otro récord mundial de abstención de las “oposiciones”, superior al 84%, según el CNE 74%, que determinaría solamente la elección de diputados representantes del régimen-“gobierno” para ocupar todos los cargos.

Un elemento sobresaliente en el comportamiento desafiante al régimen por la Sociedad Civil lo habría conformado en ambas consultas un comportamiento electoral inesperado que sorprendería al régimen-“gobierno”-“oposiciones” en razón de la certeza pública de que había desaparecido el secreto del voto, por lo que las graves consecuencias, los castigos y premios de todo orden y grado administrados por el régimen de ocupación mediante las listas del apartheid criollo “Tascón” y “Maisanta” caerían sobre cada uno de los votantes así como de los abstencionistas.

Téngase presente que en ambas convocatorias electorales, como en todas las demás realizadas a partir de AGOSTO2003 no habría sido necesario ni siquiera arribar a la mitad del cronograma electoral de su organización para declararlas nulas, en razón del escandaloso número de violaciones de todo orden en sus etapas preparatorias, que habría permitido a un CNE y a tribunales independientes ordenar su suspensión y la denuncia de sus responsables ante la Justicia Penal.